Los precios de los alimentos seguirán siendo elevados y podrían incrementarse aún más, amenazando a muchos países pobres dependientes de la importación, sobre todo en África, señaló un informe de la Organización de las Naciones Unidaspara la Agricultura y Alimentación (FAO).
El informe, titulado "The State of Food Insecurity in the World 2011" (El estado de la inseguridad alimentaria en el mundo), advierte también de cómo la crisis de la hambruna actual en el cuerno de África, está dificultando a la comunidad internacional lograr sus objetivos establecidos para reducir el hambre en el mundo a la mitad hasta 2015.
Se debe recordar que el número de personas que sufrieron de hambre en 2010 fue de 925 millones, frente a los 850 millones del periodo 2006-2008.
Incluso señaló que si se cumpliera los objetivos del milenio de reducir el hambre a la mitad hasta 2015, 600 millones de personas seguirían aún desnutridas en los países en desarrollo.
Las tres agencias de la ONU que se ocupan en temas de alimentación señalaron que si la población mundial sigue creciendo, los gobiernos tendrán que actuar "con más fuerza para combatir la inseguridad alimenticia del planeta".
"Debemos reducir el derroche de alimentos en los países desarrollados mediante políticas educativas y reducir las pérdidas de alimentos en los países en desarrollo incentivando la inversión en el conjunto de la cadena de valor, sobre todo en el proceso post-cosecha", indicaron.
Agencias.
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